Mostrando entradas con la etiqueta cocina búlgara. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta cocina búlgara. Mostrar todas las entradas

miércoles, 8 de julio de 2020

Nata no es 😋

    Había prometido daros la receta del yogur escurrido y aquí llega ^^ Resulta que ya lo había dibujado hace años, para un libro que se publicó en Bulgaria así que, sólo he retocado los dibujos porque faltaban algunos pasos y los he traducido al español. Es una cosa sencillísima, que tan sólo requiere prever un día para que escurra bien. Tiene un montón de usos, tanto en recetas dulces como saladas y ..si os gusta el queso philadelphia o el sabor "nata"....creo que os conquistará :) Es similar sólo que casero, más ligero y más sano.
   Con esto ya tenéis la fórmula completa para poder hacer aquel sanísimo postre búgaro, más rico todavía (si cabe). Otro día dibujaré una receta salada usando el yogur escurrido, para que podáis probarlo también así y ya veréis cómo se os dispara la imaginación cocinera ^^

  * Truco: en lugar de la tela, podéis usar una media (limpia, por favor), que funciona de maravilla y además, te ríes. 
Yo uso siempre la media xD
  * Cantidades: con 1 kilo de yogur natural (o 12 yogures) sale medio kilo de yogur escurrido - unas 4 raciones 

  Podéis echar un vistazo al libro que os mencionaba arriba, pinchando en el apartado de "libros publicados" (arriba, en el menú). Fue mi primer libro publicado en Bulgaria y le tengo especial cariño. Se titula "Geografía deliciosa" y trata de dos niños que recorren Bulgaria en un viaje, donde descubren a la vez la gastronomía y la geografía búlgaras. Cocinan, hacen trastadas, conocen lugares, se enamoran, y aprenden montones de cosas. 
Es una pena que esté agotado, y que esté sólo en búlgaro y en ruso, de momento. Pero si un día lo traducimos al español, os avisaré sin falta. 

  El libro tiene una segunda parte, donde la acción se desarrolla en la ciudad en lugar de en el campo. Pero por una serie de circunstancias de la vida y de decisiones desacertadas por mi parte, no llegué a ilustrarlo. Muy a mi pesar, porque prometía ser muy muy divertido.. El libro se publicó de todas formas y quedó muy bonito, por supuesto, - pero fue gracias a la ilustradora Siyana Zaharieva (con más agallas que yo, en aquel momento) que suplió mi ausencia y salvó el propósito (¡gracias!). 

  En cualquier caso, han quedado ilustradas para la posteridad un montón de recetas búlgaras tradicionales 😊 Así nos aseguramos de que no se olviden. Yo, desde mi rinconcito, seguiré aportando dibu-recetas a este recetario tradicional e intentando enamoraros un poquito de los sabores del Este 😋


  Feliz tarde de un miércoles cualquiera
❤️

   

sábado, 4 de julio de 2020

Al día siguiente... díselo en búlgaro 😎 Sobremesa de las albóndigas y clase #4

   Pongamos que hoy es "al día siguiente" de la segunda cita. Pongamos que vuestro experimento ha salido tan exitoso que no os dio tiempo a comeros todas las albóndigas (💕). Es raro que sobren pero, si ocurre, hoy lo solucionamos.

   Prometí aclarar un poquito el misterio que rodea los kiufteta (sí, además son "los"). Como decía el otro día, las albóndigas que os enseñé no encajan mucho en la imagen que (creo) en España se suele tener de una albóndiga. Estas son grandes y algo aplastadas, y no pequeñas y redonditas. Y lo típico es hacerlas a la parrilla o fritas en sartén (o como nosotros los herejes - al horno), a diferencia de las recetas tradicionales de aquí -  con su salsa y su pan para rebañar. Podríamos presentar las albóndigas españolas a las albóndigas búlgaras... y ver qué pasa , juas juas juas... 

  
   Aquí, como en otras tantas ocasiones, las culpables del lío son las pobres palabras. Y es que la misma palabra "albóndiga", en realidad no se traduce del todo bien de cocina a cocina. Lo que puede provocar malentendidos múltiples. Igual desconozco todos los géneros de la albóndiga española, perdonadme si la estoy encasillando cual ignorante. 

   En Bulgaria, "kiufté" es la palabra que se usa para traducir "albóndiga". Pero puede ser la albóndiga pequeñita en salsa, la grande de la hamburguesa, la del filete ruso, la de la parrilla búlgara... eso todo es un "kiufte". No hay otra palabra. Para decir "hamburguesa" se usa el anglicismo. Y los "filetes rusos"..la verdad es que no tengo ni idea de cómo los llaman..vaya búlgara. Y tampoco tienen un nombre aparte estos kiufteta que, hechos a la parrilla, son casi un emblema nacional

   Por otro lado, ya visteis que "kiufteta" pueden ser también unas albóndiguitas pequeñas y redondas - si recordáis aquella receta de la Sopa de albondiguitasEs como si en búlgaro, al decir "albóndigas" se entiendera una larga lista de formas y preparaciones...a modo de enjambre albondiguil imaginario... donde sólo se puede intuir de cuál se trata por el contexto (sin embargo siempre está claro, no sé cómo).

   Pasa lo mismo con la palabra "mano" ("raká", ya la aprendisteis aquí) que significa a la vez mano y brazo - o sea, todo el conjunto -, y es el contexto el que concreta a qué te estás refiriendo. Luego los búlgaros tenemos también codos, muñecas, dedos y hombros, como el resto de las personas... Pero nuestro manobrazo es un órgano único.

   Así que, me temo, esta aclaración sólo aclara que el misterio es un misterio. Como siempre, mi blog, tan funcional.

   Os dejo la chuleta de la clase de las albóndigas que, al fin y al cabo, ¡de eso se trataba!
   
   Si os acordáis, hace nada os enseñé la palabra búlgara para decir "queso"(que fue la primera de todas:) "queso"👉 sírene. Y ahora os estaréis preguntando, qué le ha pasado a la palabra queso en esta receta. Pues la respuesta es:

martes, 7 de noviembre de 2017

Sopa de albondiguitas (Supa tópcheta)

   Allá por agosto del 2012, un bonito día, en un bonito lugar, la mamá de la artista estuvo preparando manjares varios en nuestro taller de cocina búlgara. Todos los platos quedaron vacíos con la misma rapidez, pero esta creo que fue la olla estrella ^^ Aquí os revelo la verdad verdadera sobre la famosa sopa de albondiguitas. Escépticos, temblad xD



Sopa de albondiguitas


500gr carne picada mixta (cerdo y ternera)
40gr queso emmental u otro queso suave
2 huevos
3-4 cucharadas soperas de arroz redondo
1 yogur natural
harina
pimienta negra molida
cominos molidos
2 patatas
1 zanahoria grande
1 cebolla
1/2 apio nabo
perejil fresco
sal



   Amasar la carne picada con el queso rallado, una cucharilla pequeña de cominos, una pizca de pimienta, sal al gusto, 1 huevo y el arroz, previamente lavado y escurrido. 

   Picar las verduras en cuadraditos (reservar la patata aparte, para más tarde). 
Poner al fuego una olla con un litro y medio (aproximadamente) de agua fría, junto con la cebolla, el apio y la zanahoria, más una pizca de sal. 

   Dejar hervir unos 15 minutos a fuego moderado y mientras tanto, ir formando las albondiguitas - del tamaño de una nuez por lo menos, o incluso algo más grandes...para los vagos y gochos 😁...pero tened en cuenta que aumentan de tamaño una vez hechas.
Rebozar en harina y reservar.

   Pasados los 15 minutos, añadir con cuidado las albondiguitas y cuando rompa a hervir de nuevo, incorporar las patatas cortadas en cuadraditos pequeños. Dejar hervir otros 15 minutos aproximadamente.

   Rectificar de sal y comprobar que las albondiguitas están listas.

   En un bol aparte, batir el otro huevo y el yogur. Al batir, ir añadiendo con un cucharón de poquito en poquito, caldo de la olla (unos dos cucharones son suficientes). Verter la mezcla de huevo a la olla, remover, hervir 1 minuto y retirar del fuego.
Añadir el perejir picado y servir.
Repetir.
...

Contado esto, abro la temporada.
Modo sopas: ON.
😁 

lunes, 27 de agosto de 2012

¿Hacemos un taller de cocina? :)

¿Os apetece? :)
Pues reservad este maravilloso domingo del 2 de septiembre para pasar un rato de lo más sabroso, junto con las cocinerísimas amigas nuestras de Apetit'Oh como anfitrionas, la Chef Búlgara - Madre y la Cartoon-Chef-Ayudante, o lo que viene a ser lo mismo - mi mamá y yo mismita. 
Desde mi humilde papel de cortacebollas y posaplatos, os puedo asegurar que vuestra barriguita sonreirá. 
Os invito a nuestro pequeño taller de cocina búlgara:) 
¿Os pico más?:) ...Pues, os contaré que aprenderéis a preparar algunas de las cosas más sencillas y deliciosas que habéis probado, como mi querida ensaladilla de yogurt cremoso.. os engancharéis a nuestra sopa de albondiguitas, absolutamente adictiva...y veréis en directo la preparación de aquel pastel de calabaza, por el que más de uno sigue suspirando..
Esto y más recetas ricas, acompañadas de algún vinito de por ahí y algún quesito de por allá, que ahora no pienso desvelar :o)

¡Os esperamos! 

*el menú completo de este taller lo encontraréis en la web de Apetit'Oh

martes, 1 de mayo de 2012

Apuntes a 3000 latidos

Un mes entre lluvias, nubes, campos verdes o arcoiris, y mañanas largas de café y conversaciones sin propósito ni orden alguno. Este fue abril, el primero desde hace ocho años que me permite celebrar las Pascuas como es debido: rodeada de abuelas, mamás, hermanas y panes por amasar :) Echaré de menos el estar y no estar, el no tener llamadas perdidas, ni reuniones, ni llaves de casa..el perderme donde es imposible y el olor a lila donde no recuerdo haberla visto.. echaré de menos el trabajar sobre un mantel de ganchillo, con un caballete en un lado y una hora más. Y un conejo gris intentando cortejar cualquier cosa o pie, que se cruce en su conejil camino. 
Ahora vuelvo a mi mesa de patas verdes, a mi pequeño desorden de comunicaciones. Me traigo las nubes y las ganas, pero la cabeza la dejo en otra parte. Que empiece mayo!
Ingredientes
(kozunak para 4 fuentes de unos 35-40mm ∅)

1kg leche + medio vasito
1 kg azúcar
2 cucharaditas de vainilla en polvo
corteza de 1 limón (o no)
40g levadura fresca de panadería
1 cucharadita de sal
10 huevos
1/2 vaso de aceide de girasol (vaso de 200ml)
unos 2-3 vasos de manteca de cerdo
harina tamizada, como para hacer una masa blandita..a ojo :}
un recipiente bien grande para amasar (artesa)
paciencia y brazos fuertes:)

1. Calentar bien la cocina. Debe hacer tanto calor, como para quedarse en manga corta:)
2. Calentar la leche a fuego suave (sin que hierva), junto con el azúcar y la vainilla (y la corteza de limón, si se quiere) - hasta que el azúcar se derrita.
3. En medio vasito de leche templadita-caliente, diluir bien la levadura más unas 4 cucharadas de harina, hasta obtener una especie de "puré". Cubrirlo y dejarlo fermentar cerca del calor.
4. Mientras tanto, derretir la manteca y batir los huevos.
5. Cuando haya subido la levadura, hacer un hoyito en la harina, echarla allí e ir incorporándola poco a poco, removiendo en círculo. A medida que se va añadiendo harina, ir incorporando también la leche, poco a poco. 
6. Después, los huevos - y más harina, a poquitos (es importante ir despacio con la harina, ya que se calcula a ojo y lo más importante en esta masa es que quede blandita)
7. Añadir el aceite y un vasito de manteca derretida. Seguir amasando. A partir de aquí tal vez no sea necesario añadir mucha más harina.
8. Ahora: amasar un poco; cuando la masa se vuelva muy pegajosa, apartarla en un lado del recipiente, añadir unas cucharadas de manteca derretida, untar bien, repetir por el otro lado, y volver a amasar. Repetir esto cada vez que la masa se vuelva pegajosa. La cantidad de la manteca es aproximada - hay que ir untando hasta que la masa sea manejable.
9. Una vez deje de pegarse, llega lo mejor:) Esta es una masa especial: se amasa y se pega:) - amasar, recogerla con las dos manos y dejarla caer desde arriba, volver a amasar, volver a tirarla, volver a amasar...y así, dice la tradición, 100 veces :) 
Pueden emplearse los puños. Sólo cuidado con partir la artesa...
10. Cuando le hayáis dado una buena paliza, hacer una bola bonita, untarla con manteca,  cubrir con film y con una mantita y dejar fermentar en paz. Doblará su tamaño.
11. Entonces: cortar la masa en tiras. Untar cada tira con grasa y las manos también, y estirar con movimientos giratorios, como si fuese una cuerda, hasta alargarla, sin que quede demasiado fina. Esas tiras se enlazan en forma de trenzas o bien en círculo, en la fuente engrasada y enharinada (dejando siempre algo de hueco en la fuente, para que al subir la masa no se salga fuera).
12. Dejar reposar por segunda vez, ya dentro de la fuente. Después, untar con huevo y espolvorear generosamente con azúcar. Hornear a unos 180º - 200º, o hasta que la masa quede hecha y la superficie dorada. 
Se reconoce si está bien preparada cuando al romper un cachito, el interior no se ve como el pan - no se hace migas, sino se separa en "hilos".

Vamos, reservaros un día entero..^_^ Eso sí, el Kozunak es todo un reto..algo parecido al Roscón de Reyes..pasadlo bien y si no sale, pues bueno, al menos habréis descargado todo el estrés :)